El toldo de brazos invisibles es sumamente versátil, ajustándose absolutamente a todas las necesidades y lugares de instalación.
Tiene una regulación de pendiente que se ajusta de 0 a 90 grados, lo que permite que el toldo quede totalmente horizontal o vertical.
El toldo de Brazos Invisibles es el modelo ideal para generar espacios habitables de sombra al aire libre. Una de sus principales ventajas es no requerir de ningun parante o estructura para su despliegue, preservando de esta manera la estetica original de la fachada.
El accionamiento puede ser de forma manual o motorizado.
Diversas aplicaciones de este toldo: balcones, patios, terrazas, ventanas, frentes de locales comerciales, galerías y sobre o debajo de techos de vidrio.